En esta conmemoración se quiere erradicar el edadismo, reconocer el rol de los abuelos/as como agentes socializadores de los nietos/as, fomentar la riqueza del intercambio intergeneracional para el bienestar mutuo, y advertir que ejercer de abuelo/a es un derecho y no una obligación.
En el Día Mundial de los Abuelos y Abuelas, CONFEMAC junto a ayuntamientos y entidades de todo el territorio nacional que se han adherido a esta campaña, ha redactado un manifiesto que recoge las bondades y privilegios de ser abuelo y abuela, reconociendo la educación en valores a través de las relaciones intergeneracionales; pero también para advertir que ejercer de abuelo y abuela no tiene que ser una obligación ni una sobrecarga, sino un disfrute con beneficios mutuos. Asimismo, recogiendo las manifestaciones populares de un estudio realizado por la Confederación, este manifiesto acoge la necesidad de erradicar el edadismo cuando se llaman abuelos y abuelas a personas mayores sin conocer su situación:
La del 26 de julio es una de las ocho campañas, relacionadas con las personas mayores, que ha puesto en marcha CONFEMAC a disposición de Ayuntamientos y entidades de todo el territorio nacional, bajo el eslogan común “Personas mayores, con los MISMOS derechos”.
MANIFIESTO:
Por último, en este manifiesto se quiere reconocer la labor de los bisabuelos/as, que en muchos países se celebra el 29 de febrero, una fecha que se eligió mundialmente porque un bisabuelo/a es como tener "un abuelo más", tal y como ocurre con los años bisiestos, que tienen un día de más.
Actualmente, y aunque esta imagen está sesgada en la sociedad, la mayoría de los abuelos/as siguen trabajando y en activo, y gracias a la alta esperanza de vida, los bisabuelos/as vienen a cumplir funciones de abuelos/as (“Abuelos/as y Abuelitos/as” suelen diferenciarlos los nietos/as). Vaya por delante nuestro reconocimiento a esas personas que han sido abuelos y abuelas por segunda vez y siguen transmitiendo la educación en valores.